sábado, 5 de septiembre de 2009

AMO EL TRANSPORTE PÚBLICO

Amo subirme a las camionetas pues en ellas trancurren una cantidad de cosas todo el día y todos los días. Gracias a estos amantes de la velocidad y del peligro fue que descubrí que la BOTELLA ENVENENADA era una canción o como negar que fue en una de estas donde escuché a Vicente por primera vez y por que no decirlo fue ahí donde nació mi gusto por la este tipo de música.

Viene a mi mente un chiste: ¿Quién entra más rápido o más fácil al cielo? un cura o uno de estos choferes?, la respuesta muy simple un chofer, pues en todo el camino hacen que las personas vayan rezando, mientras que el cura los aburre con sus sermones el la misa.
Y es que ayer tuve un encuentro cercano y no fue del tercer tipo, sino ma bien todo lo contrario, como dice mi hermana menor, VÍ A CRISTO PARADO. Ya que GRACIAS A DIOS y la destreza de un buen piloto (no de la camioneta) nos libramos de chocar de frente contra otro carro, lo extraño de todo esto es que cuando siento que mi vida está en peligro suelo cerrar los ojos y morderme con tanta fuerza y solo espero lo peor. Ayer no fue así ví todo de frente y con los ojos bien abiertos.
Amo conducir, es mas lo considero relajante, pero de algo estoy seguro es que quizá muera dentro de un bus o algo que tenga que ver con ellos.

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