Hace algunos días decidí, después de hacer algunos cálculos sobre mis minutos del mes en mi celular, me llevo una sorpresa, por primera vez descubro que tengo más de 60 minutos sin utilizar a tan solo un par de días antes de que comience mi nueva factura.
Y es de este modo que decido llamar a la causante de este blog. Hablamos por casi 50 minutos y durante este tiempo me hizo recordar lo bello que es estar solo, de lo simple que es la vida, sin complicaciones, sin esperar a nadie, o la maldita puntualidad, en fin todos aquellos detalles que son importantes cuando se reunen dos o más personas.
Siguendo con esta desenfrenada ola de caprichos y harto de esperar que alguien se arme de valor para ir al cine conmigo decidí irme solo. Todo fue perfecto, hubo poca gente en el cine y pude ver la pelí como a mí me gusta.
En resumen puedo decir que no necesito de compañia para poder hacer todo lo que me gusta, solo basta el deseo, una buena taza de café y muy poco dinero.
Y es de este modo que decido llamar a la causante de este blog. Hablamos por casi 50 minutos y durante este tiempo me hizo recordar lo bello que es estar solo, de lo simple que es la vida, sin complicaciones, sin esperar a nadie, o la maldita puntualidad, en fin todos aquellos detalles que son importantes cuando se reunen dos o más personas.
Siguendo con esta desenfrenada ola de caprichos y harto de esperar que alguien se arme de valor para ir al cine conmigo decidí irme solo. Todo fue perfecto, hubo poca gente en el cine y pude ver la pelí como a mí me gusta.
En resumen puedo decir que no necesito de compañia para poder hacer todo lo que me gusta, solo basta el deseo, una buena taza de café y muy poco dinero.
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